"Te doy los siguientes cielos, el cielo en el que pasa tu amigo y eres feliz corriendo a su lado, el cielo en el que juegas con una perrita café clara con la libertad de las nubes, el cielo en el que eres un supermodelo perruno de un artista en ciernes, el cielo en el que te puedes comer no solo mis pantalonetas sino también mis medias"
Me llamo Chocolate, pero me dicen choclis, choquis, choco, pero si fuese por mi me llamaría gowuu, que va más con mi pensamiento perrino, y si el chandoso de telmex puede hablar perruno ¿Por qué yo no? Ultimamente he salido con un sujeto que simplemente me aplaude, me dice ey vení!, vamos gordo (Sólo le falta decirme papí y esto ya es otra cosa) o simplemente me agarra de la oreja para que yo no cruce la calle cuando estoy que reviento de emoción, una forma de comunicarse que entiendo claramente.
Es un tipo muy practico se le ocurrió que era buena idea no llevarme del collar cuando se dió cuenta que sacarme y trotar no funcionaba si yo era un lastre que le detenia mientras corria, a mi me encantó la solución propuesta, me siento libre, no me talla nada y puedo irle a oler el tracero a cuanto perro yo quiera (wa wa wa), aunque él prefiere que sea a las perritas y se muestra contento cuando es así.
Un día, íbamos por la calle y en mi fabulosa libertad empecé a alzarle la pierna a todo y en una acera frente a una casa deje una extensión de mi color chocolate en trozos (wa wa wa), habia mucha gente mirando, a mi me importa un culo, el mundo para mi es un inodoro gigante, pero mi amigo tiene que llaman pena, que un no entiendo, así que salimos corriendo a reirnos a las dos cuadras, todavía no comprendo porque últimamente no hemos pasado por allí...
Aquella noche habíamos escogido un camino diferente, mis instintos estaban a reventar, ¡Es maravilloso ir de paseo! No importa si he hecho dos maratones o lo que sea,siempre listo para ir de paseo, "siempre listo cuando un amigo toca la puerta" es mi lema, es explicable que andará un poco más feliz al estas patas pisar nuevos lugares.
Subimos trotando, mi compañero iba algo feliz me imagino que fue por la escapada que tuvimos. Llegamos y había una perrita café, llamada coffina, que de cariño le decían coffi, empezamos a jugar, soy un tipo juguetón por naturaleza, saltamos, correteamos y reímos al mejor estilo perruno, sobra decir que nos olimos el trasero (wa wa wa), entonces, caminando como si las piernas se doblaran como plastilina, como si sus piernas bailaran, a un ritmo natural e hipnótico, apareció una chica, sonrió mientras mi amigo deseaba saltar, jugar y corretearla al mejor estilo chocolate, pero los hombres al parecer han callado esa parte y se han puesto más racionales.
- ¡Choco! Llamo él.
Le ignoré un rato, es que hay gente que no comprende que la seducción es juego y yo ya estaba brincando con coffi la cosa iba bien, pero él insistió entonces camine a regañadientes, soy tal vez un poco pasional, pero al final termino comprendiendo, y como mi amigo también estaba en son de conquista, tal vez necesitaba un poco de ayuda, así que me acerque meneando mi fabulosa cola y mostrando mi más espectacular mirada. Así que la chica me tocó y dijo una verdad irrefutable, "¡Qué lindo!"
Ellos hablaron otro rato, yo estuve pendiente.
Cuando volvíamos él estaba muy contento, me dijo: chonchi lindo, y yo supe que eso significaba: "Creo que estoy un poco enamorado"
Tavo.
Me llamo Chocolate, pero me dicen choclis, choquis, choco, pero si fuese por mi me llamaría gowuu, que va más con mi pensamiento perrino, y si el chandoso de telmex puede hablar perruno ¿Por qué yo no? Ultimamente he salido con un sujeto que simplemente me aplaude, me dice ey vení!, vamos gordo (Sólo le falta decirme papí y esto ya es otra cosa) o simplemente me agarra de la oreja para que yo no cruce la calle cuando estoy que reviento de emoción, una forma de comunicarse que entiendo claramente.
Es un tipo muy practico se le ocurrió que era buena idea no llevarme del collar cuando se dió cuenta que sacarme y trotar no funcionaba si yo era un lastre que le detenia mientras corria, a mi me encantó la solución propuesta, me siento libre, no me talla nada y puedo irle a oler el tracero a cuanto perro yo quiera (wa wa wa), aunque él prefiere que sea a las perritas y se muestra contento cuando es así.
Un día, íbamos por la calle y en mi fabulosa libertad empecé a alzarle la pierna a todo y en una acera frente a una casa deje una extensión de mi color chocolate en trozos (wa wa wa), habia mucha gente mirando, a mi me importa un culo, el mundo para mi es un inodoro gigante, pero mi amigo tiene que llaman pena, que un no entiendo, así que salimos corriendo a reirnos a las dos cuadras, todavía no comprendo porque últimamente no hemos pasado por allí...
Aquella noche habíamos escogido un camino diferente, mis instintos estaban a reventar, ¡Es maravilloso ir de paseo! No importa si he hecho dos maratones o lo que sea,siempre listo para ir de paseo, "siempre listo cuando un amigo toca la puerta" es mi lema, es explicable que andará un poco más feliz al estas patas pisar nuevos lugares.
Subimos trotando, mi compañero iba algo feliz me imagino que fue por la escapada que tuvimos. Llegamos y había una perrita café, llamada coffina, que de cariño le decían coffi, empezamos a jugar, soy un tipo juguetón por naturaleza, saltamos, correteamos y reímos al mejor estilo perruno, sobra decir que nos olimos el trasero (wa wa wa), entonces, caminando como si las piernas se doblaran como plastilina, como si sus piernas bailaran, a un ritmo natural e hipnótico, apareció una chica, sonrió mientras mi amigo deseaba saltar, jugar y corretearla al mejor estilo chocolate, pero los hombres al parecer han callado esa parte y se han puesto más racionales.
- ¡Choco! Llamo él.
Le ignoré un rato, es que hay gente que no comprende que la seducción es juego y yo ya estaba brincando con coffi la cosa iba bien, pero él insistió entonces camine a regañadientes, soy tal vez un poco pasional, pero al final termino comprendiendo, y como mi amigo también estaba en son de conquista, tal vez necesitaba un poco de ayuda, así que me acerque meneando mi fabulosa cola y mostrando mi más espectacular mirada. Así que la chica me tocó y dijo una verdad irrefutable, "¡Qué lindo!"
Ellos hablaron otro rato, yo estuve pendiente.
Cuando volvíamos él estaba muy contento, me dijo: chonchi lindo, y yo supe que eso significaba: "Creo que estoy un poco enamorado"
Tavo.
